Los procesos de fabricación o producción, transforman materiales y materias primas en productos que pueden ser finales o intermedios. Los productos finales son los que se comercializan en tiendas y servicios de venta a los consumidores. Los productos intermedios son componentes o piezas que son adquiridos por otras empresas, como materia prima en su proceso de producción.
Por ello el proceso de producción de nuestra empresa puede ser una etapa en toda la cadena productiva de un producto final. Los impactos sociales y ambientales de nuestros sistemas productivos pueden ser también un aparte de todos los impactos causados por la cadena de producción.
Los procesos de producción son grandes consumidores de energía y agua, también generan residuos, en forma de emisiones gaseosas a la atmósfera o como residuos sólidos o líquidos. Los residuos sólidos o líquidos si son peligrosos son tratados por gestores especializado y si no son nocivos pueden acabar en vertederos.
Procesos productivos en una economía global
En países con legislaciones poco exigentes los procesos productivos serán seguramente más demandantes en energía y agua, mucho más contaminantes y con mucha mayor siniestralidad laboral que en países que exigen a las empresas ciertos cumplimientos e implementan sistemas de control. Dicho de otro modo, no existen garantías de mínimos cumplimientos ambientales y sociales en los sistemas productivos de estos países con menor nivel de exigencia.
En cierto modo se crea una especie de competencia desleal que benefician económicamente a las empresas que instalan sus centros productivos en estos países o que simplemente se abastecen de empresas instaladas en estos países menos exigentes.
La ONU pide la complicidad de las empresas para mejorar su impacto social y ambiental como vía para cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible. Uno de los segmentos más importante es el de los sistemas productivos.
La globalización ha servido para llevar riqueza a países pobres, conde se ha desplazado gran parte del tejido producto. A su vez la globalización está generando grandes impactos ambientales y sociales en estos países.
Procesos productivos y tecnología.
Los procesos de producción están en continuo desarrollo. Existen actualmente procesos productivos muy respetuosos con el medio ambiente con altos niveles de eficiencia energética y muy bajos niveles de contaminación y generación de residuo.
La tecnología existe y está disponible, pero a priori es más caro producir de forma efectiva segura y poco contaminante. Digo a priori porque si esto fuese real las empresas no invertirían en este tipo de instalaciones, y sin embargo lo hacen. Estas tecnologías se desarrollan porque las empresas las implementan para reducir sus costes energéticos, su consumo de agua y materias primas, para reducir de emisiones y residuos y para aumentar la seguridad.
¿Qué empuja a las empresas a aplicar mejorar tecnológicas en sus instalaciones?
-
Reputación
Ninguna empresa quiere aparecer en la prensa por incumplimientos ambientales y sociales en sus instalaciones o de sus suministradores. Las consecuencias económicas son nefastas para las empresas. La imagen deteriorada, otras empresas querrán desligarse de empresas con mala reputación o imagen
-
Reducción de costes
Los procesos eficientes generan ahorros para la empresa. A largo plazo únicamente las empresas que invierten en mejorar sus instalaciones pueden hacer que sus negocios sigan siendo rentables.
-
Evitar sanciones
Los incumplimientos sociales y ambientales acaban provocando sanciones, con su repercusión económico y de imagen. A medio plazo es más barato invertir en mejoras de producción que pagar sanciones.
-
Productividad
Mejorar las instalaciones y los procesos productivo aumenta la satisfacción de los trabajadores, su compromiso con la empresa y su productividad.
¿Por qué entonces crecen las empresas en países menos exigentes en aspectos ambientales y sociales?
En los inicios de la globalización se ha priorizado reducir los precios de los productos. Aunque los ingresos de la población en los países desarrollados no hayan aumentado se ha aumentado su poder adquisitivo y el consumo bajando el precio de los productos. Se ha extendido la economía de usar y tirar.
Inicialmente las consecuencias ambientales y sociales eran muy locales y ni los consumidores ni las empresas eran conscientes de ellos.
Con el tiempo los problemas ambientales causados por este modelo de negocio se han hecho patentes a escala global (cambio climático, muertes por contaminación ambiental, pérdida de recursos, o microplásticos.
El aumento del consumo por la nueva clase media de los países en desarrollo, la escasez de recurso y la presión ambiental y social se hace cada vez más evidente y se ven como problemas cercanos que nos afectan directamente.
Hemos iniciado el cambio hacia un modelo productivo más sostenible.
Hemos iniciado una nueva época en los problemas globales causados por este modelo de negocio no son aceptables y tiene fecha de caducidad. La ONU, la UE, y la mayoría de países del mundo aumentan las exigencias de las empresas, negocios para cambiar la forma de producir. Las peticiones se traducirán en legislaciones y normas cada vez más exigentes.
Muchos empiezan a aplicar medidas proteccionistas para fomentar la producción interna y luchar contra la “competencia desleal” de algunos países. De esta forma se generan puestos de trabajo locales y se aumenta la recaudación de impuestos que repercute el beneficios sociales directos. Los ciudadanos están más concienciados y analizar el origen de los productos y su historia productiva. Los países permisivos con aspectos ambientales y sociales serán minoría y dejará de ser rentable mirar a otra parte.
Automatización y su impacto social
Los procesos de automatización son inevitables, pero tiene su repercusión en el empleo, en los ingresos de los gobiernos por impuestos y por lo tanto en beneficios sociales para la población.
Será inevitable la desaparición de trabajos manuales que no generen valor añadido y que puedan automatizarse. Sin embargo, la automatización implica sistemas de producción intensivos y estandarizados. La automatización puede conseguir abastecer la población con bienes básicos a precios. Esto puede acabar con la pobreza y cubrir las necesidades básicas de toda la población, alimentos, medicamentos, sopa vivienda, agua.
También puede acabar con trabajos con alta exigencia física, en cierto modo la automatización substituirá la mano de obra barata que han buscado las empresas en la globalización. Si una empresa puede utilizar robots a precios muy asequibles que no necesitan descansar, para que va a necesitar ir a países remotos para emplear a mano de obra barata.
Por todo ello desde el punto de vista de la sostenibilidad la automatización y la robotización puede ser muy positiva. Con el tiempo habrá que abordad los efectos negativos en la merma de puestos de trabajo principalmente en los países desarrollados.
Por el contrario, se valorarán los productos artesanales, la originalidad los productos exclusivos. Es posible que tengamos robots fabricando piezas y componentes que pequeñas empresas o artesanos customicen para sacar al mercado piezas únicas.
Nos espera un trabajo ingente para crear una industria totalmente automatizada que recicle al 100% los revaloriza y nos genere materias primas y recursos sin agotar los recursos.
No es probable que ningún gobierno frene el proceso de automatización para mantener puestos de trabajo, renunciando a aumentar el poder adquisitivo de la población. Posiblemente el precio social y ambiental de renunciar a ello sea más elevado que el de aceptarlo y compensar sus efectos negativos en la población con ayudas sociales.